La intendenta de Marcos Juárez, Sara Majorel, publicó recientemente en sus redes sociales —Instagram y Facebook— un video donde explica a los vecinos los motivos del cobro de la tasa municipal por la obra de luminarias.

 Sin embargo, la publicación generó repercusión y numerosos comentarios críticos, lo que llevó a su equipo de comunicación a bloquear la posibilidad de comentar tanto en la publicación como en otras posteriores.

La decisión abrió el debate sobre los límites de la participación ciudadana en los espacios digitales oficiales y sobre qué tan adecuado es restringir la interacción en cuentas públicas que comunican actos de gobierno.

 1. Desde lo institucional y democrático

Cuando una autoridad pública utiliza redes sociales para comunicar actos de gobierno, ese espacio deja de ser estrictamente personal y pasa a tener carácter institucional.
Por tanto, bloquear comentarios o cerrar la interacción puede interpretarse como una limitación al derecho a la participación y a la libertad de expresión de los vecinos, sobre todo si se trata de temas de interés público, como una tasa municipal.

 Alternativa recomendada:
En lugar de desactivar los comentarios, se pueden moderar mediante:

• Filtros automáticos de lenguaje ofensivo.
• Eliminación puntual de mensajes agresivos o que vulneren normas de convivencia.
• Publicación de un aviso visible que indique:
  “Los comentarios son bienvenidos siempre que mantengan el respeto y se refieran al tema de la publicación.”

 

 2. Desde la estrategia comunicacional

Bloquear comentarios suele generar el efecto contrario al buscado: incrementa la desconfianza o da la impresión de que se “silencia” a la ciudadanía.
En cambio, abrir un canal de diálogo (aunque sea controlado) demuestra transparencia y vocación de escucha.

 Alternativas posibles:

• Habilitar comentarios solo por un tiempo (por ejemplo, 48 horas).
• Redirigir los reclamos a un canal formal:
  “Podés dejar tu consulta o reclamo en el sitio oficial www.marcosjuarez.gov.ar o en atención al vecino.”
• Publicar un video complementario de preguntas frecuentes para responder dudas sin entrar en confrontaciones directas.

 

 3. Desde lo legal y de protección de datos

No hay una norma específica que obligue a mantener abiertos los comentarios en redes, pero sí rige el principio de publicidad de los actos de gobierno (art. 1 de la Constitución Nacional y leyes de acceso a la información pública).
Por tanto, bloquear comentarios no es ilegal, pero sí cuestionable en términos de transparencia y rendición de cuentas.

 

 En síntesis

•  Cerrar comentarios: no es recomendable, aunque posible.
• Moderar y encauzar la participación: es la alternativa más sana, transparente y comunicacionalmente inteligente.
•  Crear espacios institucionales de escucha (formularios, encuestas, buzones virtuales) puede reducir la tensión y mejorar la relación con la ciudadanía.