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2025-07-13

Cuando el arte se oxida: De la Bienal al olvido: ¿qué pasó con las esculturas de Marcos Juárez?

 A más de una década de la emblemática Bienal Internacional de Escultura que se desarrolló en nuestra ciudad entre el 22 y el 29 de julio del año 2014, las obras que alguna vez embellecieron el paisaje urbano hoy lucen deterioradas, rotas, sin identificación.

En aquella oportunidad, diez artistas provenientes de cuatro continentes trabajaron bajo la temática de “La danza”, utilizando mayormente chapas metálicas lisas como material de base.

El evento fue impulsado por el reconocido escultor y miembro fundador de la Fundación Urunday, Fabriciano Gómez, quien destacó en ese momento la trascendencia cultural del encuentro:
«Nadie se acuerda de los escultores famosos, pero sí de las obras que dejan. Es un hecho cultural de envergadura y es importante contar con apoyo para poder concretarlo», expresó.

El primer premio del jurado fue otorgado al argentino Raúl “Pájaro” Gómez, por su obra “De a dos”. Lo siguieron el polaco Piotr Twardowski, el alemán Robert Kögel y, con una mención especial, el portugués Hugo Maciel.

Sin embargo, trece años después, la falta de mantenimiento, el impacto del clima y la ausencia de un plan de conservación han dejado a muchas de estas esculturas en un estado crítico. Algunas presentan daños estructurales evidentes, otras han perdido sus placas identificatorias, y varias se encuentran completamente abandonadas.

¿Qué se necesita para mejorar estas obras?

  • Limpieza especializada:Es el primer paso para recuperar su apariencia original.
  • Reparación estructural:Muchas esculturas presentan daños que afectan su integridad.
  • Conservación continua:No basta con una restauración puntual. Estas obras necesitan un plan permanente que garantice su preservación a lo largo del tiempo.
  • Identificación:Es fundamental reponer las placas con los datos de los autores, títulos y años de creación, ya que muchas han sido robadas o se han perdido.

 Recuperar estas esculturas no es solo un acto de preservación del patrimonio, sino también una forma de honrar a los artistas que eligieron nuestra ciudad para dejar su legado.